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Kevin
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Ellos nunca se han ido, pero el más reciente disco de Wisin & Yandel los proyecta de regreso. Y, como en la mayoría de las bievenidas, siempre hay emociones revueltas, pero esta tarde Los Vaqueros provocaron casi la histeria de niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y hasta de una señora de 70 años que aguardaban por ellos para llevar a su casa su disco firmado.
Cerca de las 3:00 de la tarde, el binomio reguetonero llegó a una tarima ubicada en la entrada de la tienda Sears del centro comercial Plaza Las Américas y la gritería no se hizo esperar. Unas 1,500 personas se dieron cita a la actividad.
La joven de 15 años, Marimar Massó, era la primera en la fila. Su ansiedad se reflejaba en el rostro. Esperaba poder firmar el disco y tomarse fotos con los intérpretes de su tema favorito, Estoy enamorado.
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"Todo", dijo la cagueña que poco después logró su objetivo.
"Lo que está pasando en el movimiento es increíble, cada vez que sacamos un producto la gente lo asimila y lo entiende, así que es increíble y aquí está el resultado", fue la primera impresión de Wisin al ver las decenas de personas que arremolinaron para verlos.
Gloria Márques estaba en la fila desde las 11:30 de la mañana para complacer a su hija Estrella Meyer, quien estaba lista para decirle a sus ídolos: "soy la fan número uno de los dos".
Las personas con necesidades especiales tuvieron el primer contacto con los exponentes de música urbana. El niño Daniel Santiago, de cinco años de edad y Deliz Michelle Sierra, de 14 años, fueron parte de ese grupo, que fue atendido por los artistas, incluidos Jowell & Randy y Franco "El Gorila" (invitados en la producción Los Vaqueros: El regreso), abajo de la tarima auspiciada por T-Mobile.
Entre la fanaticada siempre hay quien llame la atención más que otros, como fueron el niño Yadiel López, de cuatro años, que parecía no poder cargar con el blin blin que llevaba en el cuello; y la vivaracha Hilda La Luz, de 70 años, que dijo estar allí por ella y por sus nueve nietos. "Me fascina", dijo la toalteña sobre el reguetón.
Wisin & Yandel inician la próxima semana una gira de conciertos por distintos pueblos de la Isla, lo que les permitirá complacer aún más a sus seguidores.
"Creo que este año Wisin & Yandel vienen a darle un cariño y aquí estamos", expresó Yandel, quien a entrada levantó sus brazos en señal de victoria.
"Estoy bien contento, porque para que a la gente de Puerto Rico le guste la música, es bien difícil, así que estamos súper contentos con esto que está pasando", agregó el ex barbero.
Otra que parecía que llevaba la música por dentro era Rocío Rivera, de Morovis. "Me encanta la música y el estilo. Son bien sexys", manifestó la mujer de 32 años después de darle un beso a Wisin.
Apoyo a Cosculluella
Wisin & Yandel no responderían preguntas de la prensa que no estuviesen relacionadas al evento o el disco. Ninguno opinó en torno al escándalo de la presentación de su colega Cosculluela entre gatilleros. Wisin mas bien aprovechó para apoyar públicamente a su compañero.
"Es algo que no conozco, pero sí puedo decir que Cosculluela está trabajando bien fuerte. Hay veces que nosotros como artistas no controlamos muchas cosas que pasan en tarima y sé que es un muchacho que quiere echar hacia adelante. De parte mía, que eche hacia adelante y que siga creciendo y que trabaje más fuerte que nunca", apuntó quien, por último, prometió cuatro funciones en el Coliseo de Puerto Rico para cerrar este año y muchos más tatuajes en su cuerpo. "Vengo virao'", aseguró.
El dúo partiría en la noche hacia Miami para continuar la promoción.
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